Luego de un año de pandemia, todos estamos viviendo la lucha entre la adaptación que tenemos que hacer y el dolor de tener que hacer el esfuerzo para adaptarnos.

El prestigioso psicoanalista franco-argentino Juan David Nasio analiza en su libro Tout le monde peut-il tomber en dépression? , los efectos emocionales de la pandemia. Menciona que la depresión COVID es inédita y la manera en que el coronavirus nos afectará a largo plazo.

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En una entrevista al diario argentino Clarín, menciona que durante la pandemia hay cuatro tipos de angustias:

1. Angustia a la enfermedad. A estar enfermo y, sobre todo, a morir solo en un hospital. También la angustia de contagiar a un ser querido
2. Angustia de estar aislado. Estamos rebeldes, sin la ilusión de que la pandemia se acaba en pocas semanas. Hemos descubierto que 10 meses después, en México, continua. No queremos estar aislados, pero a la vez no tenemos intimidad por estar encerrados en casa todo el tiempo.
3. Angustia a la incertidumbre económica. No sabemos cómo va a evolucionar el trabajo, la empresa y el país en el plano económico.
4. Angustia de que falta un futuro. No hay línea de horizonte; no hay horizonte definido. No podemos proyectar nada. Hay una dificultad de poder proyectarse en un futuro porque no hay futuro claro.

Esta angustia sigue creciendo con el tiempo, al ver que el fin de la pandemia está más lejano de lo esperado y los efectos sociales, emocionales y económicos siguen creciendo.

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Por eso es importante que cada uno de nosotros realice acciones específicas para combatir el tipo de angustia que nos esté acechando. Algunos consejos que sugieren los expertos son:

Para combatir la angustia a la enfermedad

La sana distancia, uso de cubrebocas y lavado de manos siguen siendo las maneras más efectivas de disminuir el riesgo de contagio. Si tienes cualquier síntoma que coincida con COVID o estuviste en contacto con alguien que tiene COVID, consulta a tu médico y hazte la prueba para descartar estar enfermo y así cortar la cadena de contagio.

La salud del cuerpo es hoy una prioridad para todos. Si tienes alguna comorbilidad como hipertensión, diabetes u obesidad, asegúrate de ir con tu doctor a tus chequeos regulares y evalúa cómo puedes mejorar tus hábitos.

Sí, el cambio de hábitos es difícil y requiere constancia y disciplina, pero cualquier mejora que puedas hacer puede disminuir tu riesgo de tener complicaciones si llegas a enfermarte. Una guía sencilla para priorizar un cuerpo sano, puede ser revisar tus H.A.C.E.S:

• Hidratación. 2 litros de agua al día
• Actividad física. 30 minutos al día y al menos 5,000 pasos diarios.
• Comida. Comer a tus horas y llevar una dieta baja en azúcar, sodio y grasas saturadas. El alto consumo de azúcar puede producir inflamación y ansiedad.
• Espiritual. Practica alguna actividad que te permita expresarte y entrar en contacto con tu estado emocional. Puede ser meditar, rezar, escribir o alguna expresión artística que te sirva como medio de expresión.
• Sueño. Dormir de 7 a 9 horas al día

Para combatir la angustia de estar aislado

Hoy más que nunca es importante que tengas una red de apoyo, personas queridas con quienes puedas contar en caso de sentirte mal. Todos necesitamos rediseñar la manera en que mostramos nuestro amor, afecto e interés, para seguir emocionalmente cercanos, aunque haya distancia física. Juan David Nasio habla de la importancia de sentirse esperado, que alguien te está esperando.

Es importante dar este apoyo recíproco cuando los involucrados estén tranquilos y puedan escucharse. Si esta red de apoyo no vive contigo, busca mantener la conexión usando las diversas herramientas virtuales, así como interacción a distancia sana en lugares abiertos y con protección.

Diseña compartir experiencias a distancia, donde puedan interactuar y seguir construyendo recuerdos juntos. Hay diversas compañías que se dedican a construir experiencias virtuales como catas, cenas especiales, clases de apreciación del arte, etcétera. Estas experiencias pueden darte diversidad en el día a día así, como entretenimiento y conexión con otras personas.

Estar aislados también nos puede hacer sentir encerrados y con poca intimidad. Por eso es importante que crees refugios para expresar tus emociones. A veces los refugios serán en compañía de otra persona o en ocasiones el refugio será en soledad. Tus refugios pueden ser para recordar, para estar en silencio, para llorar, para distraerte, para escribir, para dibujar, etcétera.

Así, las emociones, que siguen evolucionando con la pandemia y el día a día de nuestra vida, tienen salida y las puedes reconocer y procesar.

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Para combatir la angustia a la incertidumbre económica

Lo primero será que revises tu sistema de finanzas personales. Ten mucha claridad, a detalle, de cuáles son tus ingresos, gastos, inversiones y deuda. Como familia todos necesitan hacer equipo y además de tener un estatus de su realidad actual, podrán buscar opciones juntos de cómo mejorarla.

Hay varias apps o software para bases de datos como Excel de Microsoft, con los cuales puedes llevar un control de tus finanzas. Recuerda que en cuestión de dinero, el detalle pequeño combinado con el tiempo pueden hacer una gran diferencia, ya sea en ingreso, ahorro, inversión o gasto.

Revisa dónde está más débil el sistema financiero familiar. Te sugiero empezar por los gastos e ingresos. Si los gastos los han disminuido al máximo y aun así no es suficiente, entonces tienes un problema de ingreso.

Algo bueno que trajo la pandemia es que nos obligó a todos a hacernos más digitales, lo que facilita los productos y servicios que podemos ofrecer a mucho más personas (no solo a los que viven en nuestra comunidad).

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Pueden comercializar un producto u ofrecer un servicio que esté alineado con las habilidades o conocimiento que tengan. Desde clases de muchos temas como música, pintura, idiomas, traducciones, cocina, consultoría, etcétera.

También pueden comercializar un producto, ya sea que ustedes mismos lo hagan, como distribuir algo ya hecho o sumarse a compañías multinivel o con sistemas de venta como aseguradoras. Lo importante es que hay muchas opciones para generar un ingreso adicional.

Identifica para qué es buena cada persona de casa. También identifica en tu red de contactos a que se dedican las personas y cuáles son sus necesidades. Ellos serán las primeras personas a quienes contactarás para ofrecerles un producto o servicio.

Adopten tener una revisión semanal de las finanzas en casa para contabilizar cualquier ingreso o gasto. Poco a poco irán ganando más control sobre el tema.

Para combatir la angustia de que falta un futuro

El cambio profundo e incertidumbre que estamos viviendo como humanidad en ocasiones nos impide proyectar nuestra vida. Una práctica que te puede ayudar es revisar tanto tu pasado como el pasado de la humanidad.

Como humanidad, esta pandemia es parte de nuestra historia, de los cambios que tenemos que vivir para seguir evolucionando. Confiemos en que saldremos adelante, así como hemos superado otros momentos históricos pasados.

Como individuo, es momento de revivir los momentos memorables alegres que has tenido en tu pasado. Celebraciones, viajes, nacimientos o logros. Tener un marco digital con tus fotos favoritas o imprimir un álbum, puede ser una práctica que te ayude a tener una ilusión y alegría en tu día a día y así, recordando el pasado, puedas construir tu futuro.

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Define objetivos y reconoce tus avances. Es muy importante que estés en acción, tengas tareas asignadas y las cumplas. Desde tareas domésticas, de aprendizaje, laborales, etcétera.

Esta pandemia nos ha hecho descubrir la fuerza de la naturaleza y la humildad de la humanidad.

¿Qué estás descubriendo acerca de ti y de tu vida gracias a la pandemia? Aun en pandemia, ¡seguimos siendo responsables de nuestra propia felicidad! Diseña constantemente tu realidad para que sigas teniendo regalos inesperados de lo que nos está sucediendo como individuos y humanidad, y no desperdiciemos este tiempo único e irrepetible.