98% de las mexicanas ejercen autoviolencia por una mala percepción de su cuerpo
La imposición social sobre cómo deben lucir las mujeres lleva a las mexicanas a tener una relación destructiva con sus cuerpos, revela estudio de Nosótrikas.
CIUDAD DE MÉXICO. El 98% de las mujeres en México ejercen algún tipo de violencia hacia sí mismas por una mala percepción que tienen sobre su cuerpo, de acuerdo con un estudio realizado por la consultora Nosótrikas Tik Tank.
La coordinadora de proyectos de la consultora, Abigail Morales, dijo en entrevista con Dalia News+Media, de Dalia Empower, que en el estudio que realizaron encontraron que las mujeres tienen relaciones conflictivas con su cuerpo debido a la demanda social que les impone lucir de cierta manera.
Señaló que entre 98% de las consultadas es autoviolencia se refleja en comentarios negativos hacía sí misma, cambio de hábitos por otros negativos, enfermedades de la conducta alimentaria, cutting (práctica en la cual las personas se autolesionan con objetos punzo cortantes) o cirugías estéticas.
“Hay pequeñas acciones que las chicas hacen o hacemos, por ejemplo, dejar de comer, que son como estrategias que [a final de cuentas] lastiman el cuerpo, pero son socialmente aceptadas […] o incluso las cirugías plásticas que están súper normalizadas, pero que al final es un daño, es algo con lo que lastimas a tu cuerpo”, indicó.
El estudio Realidades del Cuerpo Femenino indica que 63% de las mujeres reportan intención de realizarse una cirugía estética, 60% se salta comidas y 40% hace ejercicio en exceso. El objetivo de ello es sentirse “atractivas”.
Las exigencias sociales sobre el cuerpo de las mujeres son tan fuertes, que el informe encontró que en para obtener algunos empleos, como el de promovendedora, uno de los requisitos es tener una talla específica.
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No obstante, otro hallazgo es quelas mujeres no recurren a ninguna instancia para denunciar discriminación laboral, pues dicha práctica es ilegal.
“No se suele demandar o hacer algo porque también [en ese] tipo de trabajos a veces son personas que nada más tienen el bachillerato" y no tienen mayores oportunidades en el mercado laboral, por lo tanto aceptan estas condiciones ilegales dice Abigail Morales.
Agrega que la normalización de estos requisitos también es otro factor que genera inacción legal.
Por lo tanto, las mujeres se conforman y aceptan hacer dieta o ejercicio para poder acceder a esos empleos, con lo cual asumen una responsabilidad que no les corresponde.
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La relación con el cuerpo cambia con la edad El informe de Nosótrikas Tik Tank también señala que durante la infancia, las mujeres sienten una mayor libertad de ser ellas mismas y no perciben de manera tan imperativa la obligación de cumplir con cánones de belleza. Por ello, califican la relación con sus cuerpos con un promedio de 7.1 sobre una escala de 10.
Sin embargo, en la adolescencia aparecen de manera más fuerte las exigencias sociales para tener un tipo de cuerpo y una forma de comportarse, por lo que califican la relación con sus cuerpos con 5.5.
El documento enfatiza, además, que esta es la etapa cuando comienzan la madurez sexual y reciben la responsabilidad de evitar ser víctimas de abuso sexual, y junto con ello una serie de tips o estrategias para 'cuidarse'.
“Se transmiten las estrategias de prevención de abuso sobre sus cuerpos, al tener una madurez sexual y poder quedar embarazadas […] se carga injustamente de responsabilidades a las víctimas potenciales, pero poco se inculca que la culpa y perversidad la tienen los agresores”, indica.
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El reporte exhibe además el impacto de las deficiencias en la educación sexual, pues solo 4 de cada 10 encuestadas mencionan haber disfrutado la mayoría de sus encuentros sexuales y 8% accedió a tener relaciones sexuales sin deseo de hacerlo.
En las décadas de los 20 y 30 del siglo pasado, el cuerpo era básicamente para conseguir pareja y cumplir con la disposición de ser madres, mientras que en los años 40 se puso a disposición de los demás como una herramienta de cuidado de hijos, hijas, pareja o padres y madres.
En la etapa de la menopausia y el climaterio, señala el documento, 65% de las mujeres reportaron sentir alivio en relación a las presiones sociales sobres su corporalidad. No obstante, tienen nuevas preocupaciones y, además, ocultan sus procesos biológicos porque para 64% es difícil pensar que envejece.
Por otra parte, en la etapa adulta y adulta mayor fue posible determinar una calificación sobre la relación que las mujeres tienen con sus cuerpos, debido a que las variaciones fueron amplias por cada persona, sobre todo, entre quienes vivieron violencias sexuales.
“Como sigue cambiando la calificación es de acuerdo a lo que vivió cada persona, por ejemplo, [entre quienes] sufrieron algún tipo de abuso, abuso sexual sobre todo, la calificación baja se mantiene mucho”, aseguró Morales.
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Entre aquellas mujeres que vivieron abuso, pero encontraron en la terapia o en el ejercicio saludable, espacios de reconciliación con sus cuerpos, califican más alto la relación que tienen consigo mismas, pues han cursado por periodos de sanación.
De acuerdo con el reporte el promedio de felicidad entre quienes practican deporte o actividad artística es de 7.4, mientras que quienes no lo hacen es de 6.7.
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